El mes de agosto es sinónimo de nuevos comienzos, de nuevas temporadas. Mes en el que las marcas comienzan a mostrar sus propuestas para los días más cálidos del año y entre los adelantados nos desvelamos con lo nuevo de CHER. Una colección con mucha actitud que se resume en looks armónicos pero jugados a la vez, dando lugar a prendas frescas, cómodas y modernas.
Este verano Jamie Bochert, considerada una de las musas de los diseñadores más influyentes de la moda, es la imagen de campaña. “Son fotos muy honestas, muy íntimas. De una mujer con una personalidad muy fuerte, con un perfil definido, una mujer con ideales”, dice María Cherñajovsky acerca de las fotos de la joven fotógrafa argentina Sofia Malamute.
De inspiración setentosa, más precisamente de una de las mejores discos de todos los tiempos: Studio 54. En la que se generaba la fusión del arte, el rock and roll, la moda y la belleza femenina, exacerbada por los excesos y el frenesí de los paparazzi. Tomando como referencia a Bianca Jagger, por sus turbantes y kimonos característicos, esa mezcla perfecta entre la perfección de los bordados japoneses y la locura del rock’n roll. Que lo podremos encontrar en bordados y estampas como en las tipologías.
En el lookbook degustamos una impronta mas descontracturada con prendas de cuero y seda a la que se le suman aros solitarios, colgantes borlas y anillos de piedras superpuestos en exceso. Resaltan los detalles de las prendas que nos llevan a un mundo más del rock’n roll psicodélico, como los foulards y jabots en camisas y tops, las faldas folder con tajos pronunciados, los pantalones acampanados y las botamangas acordonadas. Para la noche los look son más románticos, vestidos largos de seda o crepe con chata, mostrando un mood más fresco y relajado.
La silueta de esta temporada estará anclada en la cintura, recurriendo al recurso de fajas que cierran los kimonos y vestidos, los cinturones acompañan a los pantalones tiro alto como a las polleras. Las prendas más vaporosas responden a un look mas lánguido, donde la figura femenina se afina y da lugar a una mujer más moderna con túnicas largas, ponchos tejidos overside sobre polleras largas de seda, camisolas abiertas y conjuntos pijameros. La reminiscencia masculina no podían faltar en la propuesta de este verano, donde se ancla la línea mas sastrera de CHER, con trajes de lino, pantalones anchos de tiro alto, prendas overside superpuestas, camisas de poplin y sacos bondeados.
Blanco y negro son los colores protagonistas, en los que podemos encontrar dentro de la gama de blancos al crudo y rosa pálido. Las estampas dan sus aportes de colores más vibrantes con fucsias, naranjas y verde lima.
Lo que vas a encontrar este verano 2016, es un nuevo universo en una colección muy rica en recursos, morfologías y materiales para la mujer CHER.
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