Devendra Banhart, el amor en tiempos del freak-folk

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Mala, lo nuevo de Devendra Banhart, es un retorno a lo rústico, una vuelta a los orígenes. El proceso incluyó componer junto con sus eternos compañeros de aventuras, Noah Georgeson y Josiah Steinbrick; usar una grabadora comprada en una casa de empeño y trastos viejos, grabar bien lo-fi en un estudio casero de Los Ángeles y diseñar él mismo la tapa del disco. Un back to basics en todo su esplendor.

Mala es también, un disco-búsqueda, una pieza artística y un estado emocional. Inesperado, intimista, magnético y lleno de sentires. Sucede que Banhart está felizmente enamorado de Ana Krass, una artista plástica y fotógrafa serbia; de hecho, en el idioma de la muchacha, Mala significa ‘mi amor’ o ‘dulzura’ o cualquier apodo cariñoso que una pareja quiera ofrendarse: el amor  definitivamente está en el aire. Y en la música. La canción que le da nombre al álbum admite en un bis casi epifánico, que el paso del tiempo es una fuerza inevitable. La línea cronológica avanzó y el excéntrico Devendra mutó hacia otros mundos, otras ideas, otros sonidos. Ese ex pelilargo desgreñado de barba vaporosa, que cantaba Feel Just Like a Child o Carmensita, nos muestra que la fuente de su creatividad, después de 7 discos, aún no se agota.

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Mala es ecléctico. Una construcción de 14 piezas musicales grabadas en cinta y una yapa que vale por dos, Something french y Loring Baker. Devendra volvió a las bases para reinventar y experimentar: durante esos 14 temas, suenan cuchillos, cadenas, vidrios rotos, látigos, cinturones de pantalones y hasta cantos de pájaros que, manipulados digitalmente, parecen sonidos electrónicos. Mala es como uno de esos cuadros de naturaleza muerta donde, en realidad, podés darle un mordiscón a la manzana y tomarte el agüita fresca del jarrón. Una puesta en escena orgánica y llena de vida.

Mala es también un libro de historias. Resulta que una santa, profetisa, escritora y compositora alemana en plena Edad Media recibe un casette VHS de la época noventosa de MTV y se quiere convertir en VJ. ¿Locura total? No, es Fur Hildegard Von Bingen que, con una cadencia casi erótica, nos invita a un viaje temporal, musical y mental. Momentos surrealistas que Devendra pinta salpicando colores por todos lados. Never Seen Such Good Things es engañoso. En realidad, la frase está cortada y sigue con… go so wrong. Un fracaso amoroso, un tropezón emocional que, en voz y música de Devendra, no es caída. Sigue Mi Negrita, un bolerito en un español caraqueño tiernísimo y casi naif donde demuestra, una vez más, que el castellano le sienta como a los dioses.  Que casi no interesa qué es lo que diga, porque la dulzura fonética lo invade todo. La perlita del CD es Your Fine Petting Duck, cuya invitada de honor es la mala personal de Devendra, Ana Krass. Una ironía hecha canción: Banhart y Krass cantan, hablan, se quieren, se despiden, se extrañan, se maltratan y se ruegan pero finalmente se abandonan. Y hacia el final del tema, ¡sorpresa! El multifacético Banhart cierra con un tramo íntegramente cantado en alemán, demostrando que se maneja como pez en el agua en cualquier océano idiomático.

Mala es un círculo. El amor vuelve en Won’t you come over, una contracara más fresca y alegre de Won’t you come home, que es casi un ruego. Dos peticiones, dos canciones de nombres similares que son cara y cruz de un mismo sentir. En medio de ese sube-y-baja que es el amor, llega Taurobolium, al fin una de las bonitas excentricidades narcóticas de Devendra. Isla, palmera, arena y mar: Taurobolium es un oasis en el disco, una huída del diablo, un intento de escape mental, una declaración de perversión, deseo y malignidad. La esperada y caleidoscópica psicodelia banhartiana.

Idas y vueltas, te quiero, te odio, me necesitás, me recordás, me olvidás y una larga lista de etcéteras: todo en un giro de 360º que vuelve al punto inicial: la musa, el amor, mala. “If love is our home / why do we wonder so? / If you’re already home / Where do you want to go?” rezan los versos finales del disco. Amor y folk. Devendra volvió.

+info: La productora Indiefolks afirmó que, en el marco de la gira latinoamericana de “Mala”, Devendra Banhart tocaría en Córdoba, en noviembre y en la Sala Astral. Sin más info que esa, y aún a la espera de confirmaciones oficiales, Devendra… ¿vendrá?

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