Hace una semana, nos presentábamos en el avant premiere de La suerte en tus manos en Showcase de Córdoba Shopping. Después de entrevistar a sus protagonistas, buscamos nuestras entradas y nos predispusimos a relajar el cuerpo.
Para mí, fueron 113 minutos en estado de fervor. Los protagonistas se acercan al disfrute más pleno y simple del enamoramiento. Claro, una comedia romántica que se expande en escenas de juegos, pero que logra momentos en cámara lenta a veces tan impulsivos como contagiosos. Pero necesarios para animarse a mover los pies en el aire.
Jorge Drexler es Uriel, un hombre divorciado y padre de dos hijos, que trabaja en la financiera heredada de su familia y se encuentra en un período de descontento con la vida: “está en un momento de crisis bastante grande, al punto de querer hacerse una vasectomía para evitar todo tipo de complicaciones, no quiere tener más hijos”, contó de su personaje.
Un día -gracias al póker- se conecta con sus deseos y se reencuentra con su novia de la juventud: Gloria por Valeria Bertucelli, quien está recién llegada de Francia y acaba de terminar una relación. En ese volver al primer amor Valeria nos confesó: “Somos bastante temerosos los dos, medios tímidos, él me decía yo no soy actor así que decime cómo hago tal, cuál cosa. Hasta que nos confesamos todas las generosidades y nos reímos mucho. Nos costaban las escenas quizás más simples. Una vez Burman nos pidió que caminemos por Corrientes, sólo eso, dijo vayan, caminen, sean novios, y nos daba una vergüenza. Y una vez que nos confesamos nos conmovimos entre los dos, y nos hicimos muy amigos.”
Daniel Burman reflexiona -pasada la tempestad- sobre el destino, las segundas oportunidades y el poder que tiene cada una de la personas al tomar decisiones que influyen y repercuten en su futuro. Eso sí, la determinación de la suerte va y viene, pero ¿cuánto ya está escrito y cuánto podemos intervenir en nuestras vidas?
Quizás me equivoque: hay algo de woodyllenesco aquí.
Decidí que nadie mejor que el director tenía que encenderse sentido por sentido. Y si bien yo estaba algo fascinada en su entrevista, Burman respondió con toda la naturalidad y la rapidez de aquellos que saben qué hacen y hacia dónde van.
La suerte en tus manos:
– A qué huele? A la primera colonia que usamos en la adolescencia
– Qué textura tiene? La de la tostada cuando entra en contacto con la manteca
– A qué sabe? A frutillas con crema
– Con qué sonido/música la identificas? Norah Jones
– Qué ves cuando la ves? Veo escrita una pantalla de por qué hago cine.
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