Por Manu Rivero
Ph / Diseño de Tapa: Fede Kenis
Hace apenas unos días salió lo nuevo de Cintia Scotch y no podemos parar de bailar. De la mano del otoño, inicia una nueva etapa para la banda cordobesa. Con un sonido más maduro y claro, pero manteniendo la esencia alegre y eléctrica que inevitablemente se pega a los cuerpos obligándolos a danzar.
Hace ya dos años que una nueva banda comenzaba a emerger en el ambiente musical, haciéndose un lugar en la escena local a grandes pasos. Los chicos de Cintia Scotch volvían de México, en donde ya estaban fusionando sus armonías vocales y electro-pop para llegar a conseguir el sonido envolvente que mantienen hasta hoy.
Con su primer EP como carta de presentación y su impronta original, lograron una gran recepción del público con una seguidilla de 5 canciones que aun seguimos coreando. Hoy, dos años después, muchísimas fechas y difusión de por medio, abril nos trae lo nuevo del quinteto y es imperdible. Francisco Valdés, Facundo Gentile, Exequiel «Berthex» Bertino, Lucas Garzón y Federico Casanova la rompen en este nuevo mix de sonidos electrizantes que nos envuelven en el halo particular de la banda.
Podría decirse que escuchar lo nuevo de Cintia Scotch es casi como volver al futuro: en un ambiente neo-futurista Yo Me Olvido y Quedate nos sumergen en un sonido ochentoso, que es moldeado de manera exquisita para encajar con un sonido pop actual, fusionando así lo antiguo con lo nuevo, rescatando lo precedente para construir lo que viene.
El nuevo material de la banda no hace más que reafirmar su lugar actual de banda exponente, y promete un progreso avasallador en la exploración de su propio sonido original. La arquitectura musical es sublime, cada integrante parece estar en su propio planeta a la vez que se conecta con los otros. La guitarra casi funk por un lado y los sintetizadores que rescatan el sonido pop-ochentoso, fluyen de manera suave y armonizan prolijamente con la base constante que marcan el bajo y la batería. Estos llevan el ritmo de manera energética, haciendo latir esa fuerza que posee la banda. Es claro que cada músico sabe bien donde está parado y esto les permite conectarse para formar un sonido uniforme que seduce y transporta en un loop eléctrico. Sobre todo esto, la voz de Pancho Valdés (integrante también de la banda Valdés) se alza complementando lo musical como la pieza principal de la maquinaria, asegurándonos que se olvidó de nosotros, pero pidiéndonos que nos quedemos un rato más. Y a eso invita lo nuevo de Cintia Scotch, a quedarse un rato mas, escuchando, bailando, dejándonos llevar.
Escuchalo en https://bit.ly/1S7xdYf
AY MAG ya te avisó!
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